jueves, 30 de agosto de 2007

Poesia Atahualpa Yupanqui


Es uno de referentes centrales de la música argentina. Aunque sólo se conoce una pequeña parte de todo lo que escribió unas 1200 composiciones, más las que siguen apareciendo entre los regalos que el poeta dejaba al que le caía simpático en el momento. Entre las composiciones que cantaba y que llevan la firma de otros autores, se destacan

“Quiero ser luz”,

Compuesta por Daniel Reguera, enfermo de cáncer y resistiéndose a la muerte:

“Se me está haciendo la noche / en la mitad de la tarde, / no quiero volverme sombra / quiero ser luz, y quedarme/

Me fui quemando en la noche/siguiendo la misma senda/ siempre atrás de una guitarra/ apagué la última estrella/No sé que dicha busqué/ qué quimeras/qué zamba me quito el sueño/ qué noche mi primavera/Hoy que me pongo a pensar/solo converso en silencio/ me miran los ojos de antes/ llenos de ausencia y de tiempo/ La misma mirada siempre/ de aquellos años tan lejos por fin me duermo en la noche/ que alumbra el lucero viejo

Si una guitarra

En 1965, Atahualpa captaría el ruego del poeta en un verso en su homenaje.

“Si una guitarra triste me dijera / que no quiere morir entristecida / me pondría a rezar sobre su herida / con tal de recobrar su primavera. Si un trovador me pidiera / un poquito de luz para su vida, / toda la selva en fuego convertida / para su corazón yo le ofreciera. / Mas, de poco valió la proclamada / pujanza de mi anhelo, si callada / la muerte te llevó, Daniel Reguera. / Pasa tu zamba por la noche oscura, / y el eco de tu voz en la llanura / sigue buscando luz y primavera”.

1 comentario:

escritorum dijo...

Gracias por esta publicación. Hay tan poco de Daniel Reguera, que escribió su epitafio magnífico, en la zamba "Quiero ser luz".